Toca hablar de Eslovaquia, un país que pasa inadvertido para muchos pero que, para nosotros, fue un soplo de aire fresco. Eslovaquia son montañas, ríos, manantiales y Naturaleza, es decir, no solamente le llamaríamos Eslovaquía, el país verde, también paraíso outdoors. Así lo hemos sentido y así nos referiremos a él.

Trekkings primaverales, ¡el cuerpo lo necesitaba!

Tras varias semanas en la increíble Rumanía, donde los kilómetros en carretera, la variación climática y la acampada libre fueron protagonistas, teníamos ganas de estirar las piernas, subir montañas, atravesar ríos… Vamos, de hacer trekking. ¿Cómo no aprovechar la colorida primavera para hacer senderismo? El cuerpo nos lo pedía a gritos.

Hemos encontrado en Eslovaquia nuestra capital Outdoors por excelencia. Lo mejor de este país es caminarlo, atravesarlo con los pies, recorrer sus caminos…

Nos estamos dando cuenta de que este viaje nos está permitiendo vivir cada parte de nosotros al completo. Francia, Suiza, Italia y Croacia fueron para nosotros una revolución mental: nuevas rutinas, soltar preocupaciones, encontrar lugares solitarios, solucionar temas mecánicos, reinventar la ruta, despojarnos de los planes… Los Balcanes (BiH, Albania…) y Europa del Este (Bulgaria y Rumanía) fueron nuestro retiro espiritual: conectando con la Naturaleza, la parte más verde, siendo parte de los paisajes, soledad en medio de multitudes, historia primitiva… Y ahora, ya en Eslovaquia, hemos hallado la paz con el cuerpo: nos hemos cansado, relajado, esforzado, caminado, subido montañas, tensionado… ¿Será que estamos cerca de encontrar la perfecta sincronización entre mente, alma y cuerpo?

Nuestra ruta por Eslovaquia

¡Como es la vida! Nuestra intención era transitar por Eslovaquia hasta Polonia sin recrearnos en el país, pero pronto entendimos que nos sentiríamos muy a gusto aquí si le dábamos la oportunidad, así que eso mismo hicimos y pudimos descubrir la gran Eslovaquia, el país verde, el país con espíritu de montañas.

“Hemos estado en Eslovaquia 7 días, 7 noches y recorrido 1340 Kilómetros en total. Hemos conocido 5 de sus 8 Parques Nacionales”.

SomOutdoors

Montes Tatras

Esta cadena montañosa perteneciente a los Cárpatos y compartida con Polonia, es la joya de ambos países. En los Tatras hay caminos de altura, lagos glaciares y una fauna salvaje que incluye osos y lobos.

En nuestro caso, disfrutamos muchísimo de las rutas de trekking que parten desde Strebske Pleso, un pueblo de invierno que es el epicentro de las pistas de esquí eslovacas en la zona. Son muchos los senderos que suben buscando lagos glaciares, nosotros fuimos a Propadske Pleso, pero no lo hicimos desde el camino asfaltado (que es el más popular), si no desde el pequeño camino de tierra y nieve (sí sí, nieve) que sale de los Jazierka Lasky (lagos artificiales).

¡Muy recomendable! Y una buena manera de conocer los Tatras sin duda. ¡Increíbles!

Liptovska Mara

Este fue el primer lago que visitamos de Eslovaquia. Pernoctamos aquí, en una reserva protegida y rodeada de Naturaleza. Es un punto tranquilo, relajante, lleno de belleza y de lugares donde admirar la grandeza del lago. Ideal para recorrer en bicicleta o para subir colinas a pie y disfrutar de las vistas.

Orava Castle

Eslovaquia es también conocida por tener muchos castillos, no todos en el mismo estado. Así que nos apetecía conocer algunos (desde los emblemáticos a los aterradores y a los derruidos).

El castillo de Orava se halla en lo alto de una colina en pleno centro de la población de Orava. El pueblo es pequeño, encantador y acogedor y el castillo es muy interesante y espectacular, no por sus torres si no por su aspecto draculesco.

Janosikove Diery

Eslovaquia, el país verde, el país de los trekkings, el país de los ríos, el país de las montañas… Pues bien, estas gargantas (Diery = gargantas) tienen todo eso y más. Sorprendidos de que este recorrido se clasifique como nivel fácil y de ver a tantos niños por el camino, las gargantas Janosikove no son aptas para todo el mundo, aunque deberían serlo.

Recomendamos llegar temprano al aparcamiento (en el que puedes pernoctar por cierto, todo de pago) para disfrutar del recorrido más bien solo/a. Para empezar, caminas al lado de un río fresco y transparente, luego por unas pasarelas, luego por unas gargantas estrechas donde ir sorteando el agua y, en repetidas ocasiones, unas escaleras de metal cuyos escalones son más estrechos que la palma de la mano.

No podemos negar que es muy entretenido, incluyendo la parte final donde puedes subir a una montaña rocosa donde hay más escaleras y pasarelas de vértigo. Lo recomendamos, pero también recomendamos pensar de antemano si es un trekking apto y, por descontado, no recomendamos que lo hagan perros (sí, los nuestros lo hicieron, pero tuvieron que ir en brazos una buena parte del recorrido).

En total, 14 kilómetros de pura diversión, adrenalina y paisajes preciosos.

Un apunte: precisamente por la dificultad de hacer este tipo de caminos con los perros, descartamos ir a Sucha Belá, la que es la garganta más conocida (y dicen que bonita) de Eslovaquia. ¡Asignatura pendiente!

Vratna Dolina

Eslovaquia podría ser una gran capital de esquí, pues tiene muchas zonas aptas para el esquí recreativo y el esquí de fondo. Estas zonas se convierten, con la llegada del buen tiempo, en senderos perfectos donde caminar y deleitarte con las montañas, ríos y bosques.

Nos hubiera encantado disponer de más tiempo para conocer este valle perteneciente a Mala Fatrá, una cadena montañosa repleta de ríos, así que recomendamos que vosotros no os quedéis con las ganas y lo disfrutéis.

Cicmany

Como sabéis, disfrutamos conociendo y explorando la Naturaleza y las zonas rurales de cada país. Por ello, apostamos por Parques Naturales y poblaciones pequeñas donde todavía haya costumbres y nos muestren su visión de vida y calidez. Sí, Eslovaquia, el país verde, tiene una comunidad de tradiciones.

Cicmany es una aldea de lo más pintoresca a interesante. Sus casas de madera están decoradas con dibujos tribales de pintura blanca y sus calles parecen mosaicos infinitos repletos de buen gusto y colores. Su arquitectura es parte del patrimonio folclórico de Eslovaquia y es un gusto pasear por sus calles y asomarse a las casas.

Bojnice Castle

Hasta hoy, podemos decir que no hemos visto un castillo tan especial y mágico como el de Bojnice.

Este castillo de corte romántico fue reconstruido hace poco. Se emplaza en una zona verde alejada del ajetreo de la ciudad de Bojnice, rodeado de lago y bosques. Es hipnotizante ver su belleza y grandeza. Recomendamos aparcar en el estacionamiento de 3 niveles situado justo enfrente de la entrada oeste al parque. ¡Levantarse con vistas al castillo es de cuento!

En línea con “Eslovaquia, el país verde” del título, Bojnice no acaba aquí. Desde el propio castillo, hacia el Norte, parten senderos que se adentran en el bosque y que te permiten descubrir un par de rutas interesantes: la de las ermitas o capillas y el mirador a la ciudad.

Una recomendación: Bojnice es centro turístico para muchas personas y la infraestructura montada va acorde a ello, verás zoológicos, granjas, parques acuáticos y de atracciones… Lo mejor es ignorar esa parte si no te hace sentir cómodo/a y centrarte en la parte más romántica y verde de la ciudad.

Devil´s Rock

Buscando información de Eslovaquia habíamos leído que es un país algo extravagante con monumentos /hechos naturales de lo más “extraterrestres”, así que para poder vivir también ese lado “oscuro”, buscamos un fenómeno al que ver de cerca y elegimos la Roca del Diablo.

Esta roca que desafía las leyes de la gravedad, se mantiene suspendida con un mínimo punto de apoyo a otra y todavía no ha cedido. Sin duda, un fenómeno geológico inusual y algo “mágico”. ¿Desde cuando las leyes de la gravedad son ignoradas y por qué en este lugar? La excursión, además de entretenida, es muy enigmática.

Jasná

Siguiendo con las pistas de esquí, pasamos una noche en Jasná para sentir de nuevo las montañas cerca. Esta zona está bastante habitada y tiene muchas construcciones en progreso con el fin de ampliar capacidad en el invierno. Sin embargo, quedan senderos de lo más bonitos: lagos, recorridos cerca del río y, por supuesto, hiking a sus picos. ¡100% Eslovaquia!

Spiski Hrad (Castillo Spis)

Nuestras últimas paradas serían en dos castillos muy diferentes. Queríamos palpar la esencia de Eslovaquia a través de sus fortalezas y, por ello, elegimos un estilo romántico de cuento (Bojnice), un castillo medieval (Spis) y un castillo derruido (Plavec).

Pues bien, el castillo de Spis es impresionante. Está coronado sobre un monte cerca del pueblo de Spisske Podharie y es patrimonio de la UNESCO. Imposible no querer fotografiarlo hasta la saciedad, es una bonita representación románica donde llegó a vivir un antiguo Rey de Checoslovaquia.

Plavec Castle

El último castillo y último punto de la ruta en Eslovaquia. ¡Menuda diferencia con los anteriores! Y sin embargo, qué belleza tan primitiva. Su aspecto casi abandonado lo hace más especial y te permite apreciar la única torre que queda en pie. Este castillo remonta su historia a la época donde se cazaba tesoros y, de hecho, fue saqueado con esa finalidad.

Es fácil imaginar su grandeza en el S. XIII, pues ahora ya es un balcón imponente al valle que le rodea.

Consejos para visitar Eslovaquia

A pesar de que no estuvimos tanto tiempo como en otros países y de que no adquirimos ningún plan de datos para el acceso a Internet, sí podemos lanzar recomendaciones generales a tener en cuenta si os planteáis visitar “Eslovaquia, el país verde”:

  • La moneda es el Euro y el pago con tarjeta es fácil y accesible, incluyendo estacionamientos.
  • Por lo general los parkings se pagan (sobretodo en lugares turísticos), aún así los precios son asequibles y en muchos lugares encontrarás tarifa especial para pasar la noche.
  • Respecto a la acampada y la pernocta en Camper, Eslovaquia no es especialmente restrictiva aunque no abre las opciones tanto como otros países. Sin embargo, siempre y cuando se respeten propiedades privadas, normas de convivencia y discreción, no debería haber problemas.
  • Eslovaquia es Outdoors y eso es, en parte, por la gente de ahí. Es habitual verlos disfrutar de la montaña cualquier día de la semana a cualquier hora. Nosotros nos quedamos asombrados por la cantidad de gente en los caminos (sin ser festivo).
  • Eslovaquia es más pet friendly que su vecina Polonia, aunque por lo general te pedirán que, si llevas perros, vayan atados.
  • En Eslovaquia deberían prohibir comprar agua embotellada. Al igual que Austria, Islandia o incluso Bulgaria, las aguas de sus ríos son 100% potables (cuanto más arriba mejor) y es fácil encontrar fuentes en las que rellenar agua.

Eslovaquia, el país verde

Hemos oído (y leído) mucho sobre Eslovenia y su verde esmeralda. Si bien Eslovaquia tiene un verde más pino, creemos que merece la pena reconocer la enorme Naturaleza que posee y disfrutarla. ¡Esperamos veros por ahí muy pronto!

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