Si miramos atrás y nos preguntamos qué decisiones han sido las más acertadas durante este año sabático, una de ellas sería la de recorrer Hungría en Autocaravana.
Cuando visitamos Rumanía en primavera tocaba saltar a Hungría y, sin embargo, el país se encontraba confinado y con restricciones de movilidad, por lo que no pudimos disfrutarlo.
¡Y es que todo nos acabaría llevando a este momento! Necesitábamos que Hungría apareciera en nuestro plan más tarde, justamente ahora, para despedirnos de una otoñal y estresada Alemania.
Repasaremos Hungría desde su parte más emocional, geográfica y os dejaremos algunos consejos para visitar este fantástico país.
Hungría: saboreando la libertad previa a la vuelta
Recorrer Hungría en Autocaravana ha sido nuestra vuelta a los viejos y buenos tiempos. Carreteras de mal asfalto, baches, carriles estrechos y señalización escasa.
También hemos vuelto a la pernocta libre, a la improvisación, a la Naturaleza, a los rincones escondidos y desiertos.
Hungría ha sido el soplo de aire que uno necesita para volver a la realidad (a veces cruda y cruel) sin una sensación de vacío, de haberse perdido algo… Hungría nos ha hecho un viaje más completo, nos ha dado la pasión, emoción y comodidad que ansiábamos, nos ha hecho sentir bienvenid@s, aventureros y viajeros.
Recorrer Hungría en Autocaravana ha sido la mejor manera de despedir este viaje que nos llevaría a Eslovenia antes de regresar definitivamente a España.
“Hemos visitado Hungría en Noviembre de 2021 durante un total de 13 días y 13 noches. Hemos disfrutado de la pernocta libre siempre y hemos recorrido 2.118 Kms.”
SomOutdoors
Nuestra ruta por Hungría
¡Qué bonita es Hungría! ¡Qué salvaje y honesta! ¿Sabías que Hungría esconde una larga tradición de vinos? ¿Que tiene una oferta cultural envidiable? ¿Que, a pesar de no ser montañosa, tiene una Naturaleza salvaje? ¡Descúbrela!
Pannonhalma: una abadía rodeada de Naturaleza
La abadía de Pannonhalma es un punto de encuentro habitual entre familias. No sólo sus edificios históricos son preciosos, si no que ofrece oportunidades de senderismo a sus alrededores dignas de visitar.
Pannonhalma es clave para la cultura húngara y europea pues es una de las abadías benedictinas milenarias más antiguas del continente. De hecho, se dice que aquí se instalaron los monjes que convirtieron a los húngaros y se promovió su actividad monástica de Hungría a toda Europa central.
Acceder al conjunto de edificios eclesiásticos tiene un coste de 1.100 HUF (algo menos de 4€) y abre por las mañanas y tardes a excepción del período de Noviembre a Enero (sólo abierto por las mañanas).
Nosotros nos quedamos, de nuestra visita, con los paseos alrededor de la Abadía, ¡qué paisajes y miradores tan increíbles!
Cseszneki Var: un castillo inesperado
Llegamos a Cseszenek buscando un sitio para pernoctar y nos dimos cuenta de que a lo alto de una pequeña colina había un castillo muy impresionante.
En resumen, amanecimos cerca de este castillo que data de 1263, poco después de la invasión mongol en Hungría. Además, aquí se creó la primera vía ferrata de Hungría. En nuestra opinión, un lugar que merece una visita.
Os dejamos aquí el lugar donde pernoctamos
Bokodi Lebegö Falu: un pueblo flotante de poco encanto
Habíamos visto fotografías de un lugar que algunos definían como las Maldivas húngaras… Sabíamos que el lago sobre el que se construyeron estas viviendas era artificial y que encontrar información sobre el lugar resultaba complicado. ¡No podíamos estar más interesados!
Al recorrer Hungría en Autocaravana y hacerlo con la calma de un país que acoge a los vehículos camper, nos dispusimos a ir y entender qué era aquello.
La realidad es que es un lago de poco encanto, con un color azul muy normal, con unas chimeneas humeantes industriales de fondo y con unas casas flotantes de madera a las que acceder por largas pasarelas, pero sin más. El interés turístico por este lugar llegó al punto de incomodar a los habitantes de la zona, por lo que conviene acceder a través del Bar Blöri Pecatanya.
Este bar de pescadores ofrece acceso a su casa a cambio de un precio simbólico de 2€ por persona. A cambio, podrás aparcar tranquilamente en el Parque de enfrente, tomar un café o infusión y visitar las terrazas del propietario.
Lago Balaton: el mar de Hungría
Hungría esconde un tesoro de lo más mágico en sus aguas, muchas de ellas termales. Pero si tuviéramos que quedarnos con una, sería con las aguas turquesas y transparentes del Lago Balaton.
Para los húngaros, alrededor de este lago se concentra la actividad veraniega, pues hay varias playas instaladas que lo rodean. El lugar es precioso, se respira un ambiente de tranquilidad magnético y está rodeada por pueblos encantadores como Tihany.
Este lugar en el que pernoctamos es de 10
Balaton-Felvidéki Nemzeti Park
Balaton no es únicamente su Lago, es un parque Natural donde encontrar bonitas rutas de senderismo y parajes únicos, os recomendamos visitar la siguiente: Szent György-hegyi bazaltorgonák.
Estas torres de basalto sobre el Monte St. George fueron una de las mejores sorpresas que tuvimos al recorrer Hungría en Autocaravana. Hay varios lugares donde estacionar y la ruta son 6,5 Kms con un desnivel de 280m.
¡Un lugar de escándalo!
¿Quieres dormir en un lugar fascinante en los alrededores del Balaton? ¡Apúntalo!
Kiskunsagi Nemzeti Park: Entre aves y dunas
No dudamos ni un minuto que debíamos incluir en nuestra ruta la visita a sus Parques Naturales. Kiskunsagi tiene una componente diferencial… Parte del terreno es público y otra parte está regentado por una fundación que da uso a la tierra.
En definitiva, algunas granjas ofrecen visita por los caminos y terrenos de Kiskunsagi, tanto de senderismo como de observación de aves en varias torres que tienen repartidas.
Los puntos que nosotros visitamos de este Parque son: Böddi kilató torony y las dunas de arena Fülöpházi homokbuckák.
Szentendre: al borde del río
Encantador pueblo que vive su punto álgido en verano, convirtiéndose en una colorida localidad que bordea un río y donde se improvisan playas.
A nosotros nos pareció un rincón precioso, un pueblo húngaro muy destacable, colorido, acogedor y animado. Os recomendamos daros un largo paseo por sus calles y por su río.
Hollókó: patrimonio de la UNESCO
Este encantador pueblo es un auténtico museo al aire libre. Calles estrechas, blancas, casas repletas de flores, adoquines, una iglesia de revista, puestos de comida y artesanías, restaurantes 100% húngaros y un castillo.
Deslumbra el cuidado y buen estado en el que se encuentran todas las instalaciones, y esto se debe a que muchas casas han sido reconstruidas varias veces tras incendios.
Este pueblo etnográfico (o museo al aire libre) no tiene coste, pero sí lo tiene el estacionamiento 400 HUF la hora (1,1X€) o 1.200 HUF el día (3,3€).
Muy cerca de Hollókó hay un monumento instagrameable como poco, el Isten Tenyere Kilátó (mano de Dios). La ubicación es tan majestuosa como la mano que nace de la tierra con detalle y emoción reflejada en cada uno de sus dedos. Si duermes en el parking donde inicia en sendero, llegarás a la mano de Dios tras 3,5 Kms de ascenso.
Aquí dejamos también el lugar de la pernocta
Región de Tokaj: el vino de los Reyes
Como ya anunciábamos al principio, uno de nuestros grandes descubrimientos tras recorrer Hungría en Autocaravana fue su pasado y presente vinícola. La región de Tokaj acuña grandes hectáreas de viñedos donde nacen vinos de una calidad reconocida en el mundo. Sin embargo la producción no es a gran escala y sus vinos no se exportan apenas, por lo que la infraestructura destinada a ello es familiar.
Eso nos brinda la oportunidad de adentrarnos en la tradición, las historias personales y entender por qué el Aszú se consideró el “Rey de los vinos” por el Rey Luis XIV.
Recomendamos la visita a la región, en especial a la población de Tarcal donde hay pequeñas bodegas (nosotros fuimos a Szedmák Winery) y también a Koporosi Pincesor que parece hecha por hobbits.
Si te preguntas donde dormir de la región, os recomendamos este lugar
Megyer-Hegyi Tengerszem: ojo azul
Sin abandonar la zona de Tokaj llegamos a un bonito rincón natural llamado el Sea-Eye del cañón Megyer.
Este lugar reúne a aventureros y familias que buscan pasar un buen momento rodeados de naturaleza. El estacionamiento (en el que puedes pernoctar) tiene un pequeño bar y campamentos donde hacer fuego.
De ahí sale un camino que te da la vuelta por el ojo azul donde también hay un par de paseos en Vía Ferrata.
Acceso libre, gratuito y muy recomendable.
Aggteleki Nemzeti Park: cuevas de cuento
El Parque Aggteleki está en la frontera con Eslovaquia y tiene lugares de incalculable valor como la magnífica cueva de Baradla-Barlang.
Para acceder a esta cueva hay dos opciones distintas que coinciden con dos senderos guiados distintos:
- Sendero fácil. Un recorrido de menos de 1 Km que parte de la entrada situada en Aggtelek. Coste: 2.900 HUF (casi 8€).
- Sendero difícil. Un recorrido de 2,3 Kms que arranca en el lago rojo y acaba en el Ekovizig Kutatoállomás. De ahí un bus vuelve a dejarte en el estacionamiento. Coste: 3.200 HUF (casi 9€).
Nosotros hicimos el sendero difícil y no pudimos quedarnos más maravillados por la experiencia. La vida subterránea que existe en Aggtelek es uno de los mejores patrimonios de Hungría que no deja de descubrir nuevas cuevas bajo su tierra.
Bükki Nemzeti Park: Accesible y popular
Fuimos a visitar el Parque Nacional de Bükki esperando tener un nuevo contacto con la Naturaleza húngara. Nos encontramos con más infraestructura de la esperada ya que es un parque muy dirigido a pasar largos días en familia.
Desde el estacionamiento sale un camino que pasea por varios estanques y acaba en una cueva. Es de pago: 750 HUF (2€)
Nos hubiera encantado explorar más este Parque y, probablemente, dar con rincones más escondidos, menos turísticos y más auténticos.
Lago Héviz: paraíso termal
Nos daba mucha lástima irnos de Hungría, nos habíamos encariñado con este país que nos hacía sentir salvajes, libres y bien acogidos, así que nos apeteció darnos un lujo y celebrar el recorrer Hungría en Autocaravana.
El Lago Héviz es un lago termal Natural sobre el cual se ha construido un centro terapéutico y varias piscinas termales que reúnen muchísimas visitas.
Para quien espera bañarse en unas aguas calientes, debe saber que la temperatura del agua es natural, no acentuada y ofrece un baño cálido, que no caliente. En invierno, alcanza los 23-25 grados y, en verano, 36-38 grados.
Respecto al coste de acceder a las instalaciones, la entrada común es de 3.500 HUF (10€) por 3 horas. ¡Ojo! Entras con guías y sólo ofrecen el tour en húngaro.
Consejos para visitar Hungría
Recorrer Hungría en Autocaravana es maravilloso. Este país es abierto, acogedor, libre y generoso. Con estos consejos, además, lo aprovecharás al máximo.
Circulación
El estado de las carreteras no es el mejor, de hecho, conducir en Hungría nos recordó el estado de las infraestructuras de Europa del Este, así que toca conducir lento y seguro.
Por otro lado, el estilo de conducción de los húngaros nos recordó al de los albaneses e italianos… Demasiado nerviosismo y prisa al volante, por lo que recomendamos extremar la precaución y los nervios.
Datos e Internet
Con el fin de no sufrir por la falta de datos, nos hicimos con una tarjeta prepago que ofrecía datos ilimitados de la operadora Telekom Magyar con un coste de 11.999 HUF (34€), esta tarjeta incluye 20GB en roaming.
Precios y pago
Hungría, a pesar de ser parte de la UE, no forma parte del espacio Euro y tiene su propia moneda: el Florinto húngaro (HUF).
Respecto al pago, se maneja efectivo, así que recomendamos llevar suficiente dinero en cash.
Pernocta y servicios
Hungría permite la pernocta libre (que no acampada), aún así tiene una buena Red de campings de los que hacer uso si es necesario.
Respecto a los servicios, en muchas áreas de descanso de la autopista, encontrarás cuartos de vaciado y opciones de llenado.
En definitiva, este país es muy Camper friendly así que recorrer Hungría en Autocaravana da gusto.
¡A disfrutar!